La semana pasada, aprovechando el último viaje de Bárbara a Sabi, me subí con ella y así de paso que la acompañábamos, el Nublo y yo pudimos hacer algo de monte que llevábamos un tiempo un poco paradetes. Nos fuimos para la zona del Balneario de Panticosa y nos dimos un paseo hasta los Ibones Azules. Mucha nieve todavía, ríos y barrancos a tope de agua por el deshielo, y un día muy bueno. No está mal para ser entre semana.
En los Ibones Azules. Ya hacía años que no pasaba por aquí. Recordaba una cabaña de métal a modo de refugio de la que en la actualidad solo queda la base donde se asentaba.
El Nublico en un ataque de amor desenfrenado.
El señor con pelo en todo el cuerpo se pego todo el rato ladrando para que le tirara piedras al ibón. Se subió a un trozo de hielo y por supuesto se quedo flotando en el hasta que se partió y tuvo que salir a nado. Qué alikate!!!
Aunque me fastidie mucho, aunque sea una salvajada a la que me he opuesto desde el principio, he de decir que me imaginaba que el "Nuevo Balneario de Panticosa" iba a ser algo mas monstruoso. La verdad es que sin parecerse nada a lo anterior el conjunto tiene bastante gusto y no es demasiado impactante visualmente (en mi humilde forma de verlo). Sin embargo todo lo que se ha hecho para llegar a esto pasando por encima de todo (vegetal, animal, mineral, legal, etico, humano,...) sigo pensando que ha sido una burrada. El señor Nozaleda, magnate del ladrillo, queriendo ofrecer un turismo de alto copete, con paquetes multidisciplinares para gente que así nunca conocerán la montaña en su esencia, se ha pillado los dedicos de una manera atroz. Ha despedido a 400 trabajadores de golpe y porrazo por no tener solvencia. Espero que no deje las cosas como están ahora porque, a pesar de que todo aparentemente está muy terminado, el tinglado que hay montado allí todavía es morrocotudo. Gruas, palas, operarios, contenedores, dumpers,... todos te hacen pensar que estás en cualquier sitio menos en pleno corazón de uno de los pedazos de Pirineo mas bonitos que existe... en fin, veremos como acaba el tema...
En los Ibones Azules. Ya hacía años que no pasaba por aquí. Recordaba una cabaña de métal a modo de refugio de la que en la actualidad solo queda la base donde se asentaba.
El Nublico en un ataque de amor desenfrenado.
El señor con pelo en todo el cuerpo se pego todo el rato ladrando para que le tirara piedras al ibón. Se subió a un trozo de hielo y por supuesto se quedo flotando en el hasta que se partió y tuvo que salir a nado. Qué alikate!!!
Aunque me fastidie mucho, aunque sea una salvajada a la que me he opuesto desde el principio, he de decir que me imaginaba que el "Nuevo Balneario de Panticosa" iba a ser algo mas monstruoso. La verdad es que sin parecerse nada a lo anterior el conjunto tiene bastante gusto y no es demasiado impactante visualmente (en mi humilde forma de verlo). Sin embargo todo lo que se ha hecho para llegar a esto pasando por encima de todo (vegetal, animal, mineral, legal, etico, humano,...) sigo pensando que ha sido una burrada. El señor Nozaleda, magnate del ladrillo, queriendo ofrecer un turismo de alto copete, con paquetes multidisciplinares para gente que así nunca conocerán la montaña en su esencia, se ha pillado los dedicos de una manera atroz. Ha despedido a 400 trabajadores de golpe y porrazo por no tener solvencia. Espero que no deje las cosas como están ahora porque, a pesar de que todo aparentemente está muy terminado, el tinglado que hay montado allí todavía es morrocotudo. Gruas, palas, operarios, contenedores, dumpers,... todos te hacen pensar que estás en cualquier sitio menos en pleno corazón de uno de los pedazos de Pirineo mas bonitos que existe... en fin, veremos como acaba el tema...
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